ASPECTO DEL CIELO EN NOVIEMBRE
Tiempo propicio para el observador casual del Cielo
9 pm: Principios del mes | 8 pm: Mediados del mes | 7pm: Finales del mes
9 pm: Principios del mes | 8 pm: Mediados del mes | 7pm: Finales del mes
Este Mapa Estelar o Celeste, (adaptado de Heavens-Above.com), presenta la bóveda celeste observada en Nicaragua durante el mes de Noviembre en el horario indicado. Está proyectado en un plano con el cenit, (90º a partir del horizonte), como punto más alto el cielo (en el centro del círculo) y el horizonte (360º) en el contorno circunscrito por los puntos cardinales con sus grados (azimut) contados a partir del Norte, en el sentido contrario de las agujas del reloj, según la secuencias siguiente:
N (Norte). 00° NE (Noreste). 45° E (Este). 90° SE (Sureste). 135° S (Sur). 180°
SW (Suroeste). 225° W (Oeste). 270° NW (Noroeste). 315° y nuevamente N (Norte). 360° |
Principales Constelaciones Visibles en Nicaragua
Noviembre | Primeras Horas de la Noche
Hacia el norte: Osa Menor (Ursus Minor); Dragón (Draco); Cefeo (Cepheus) y Casiopea, (Cassiopeia).
Hacia el Oeste: Lira (Lyra); Cisne (Cygnus); Águila (Aquila); Delfín (Delphinus). Cerca del Cenit: Pegaso (Pegasus). Hacia el Este: Andrómeda (Andromeda); Perseo (Perseus); Triángulo (Triangulum). En el Zodíaco: Sagitario (Sagittarius); Capricornio (Capricornus); Acuario (Aquarius); Peces (Pisces); Carnero (Aries); Toro (Taurus). Hacia el Sur: Ballena (Cetus); Erídano (Eridanus); Pez Austral (Piscis Austrinus); Grulla (Grus); Fénix (Phoenix); Tucán (Tucan). |
Entre las estrellas más brillantes del mes, en la categoría de 1ª magnitud, son visibles en orden decreciente de brillo: Vega de Lira; Capella del Cochero; Rigel de Orión; Achernar de Erídano; Betelgeuse de Orión; Altair del Águila; Aldebarán del Toro; Fomalhaut del Pez Austral y Deneb del Cisne.
A mediados del mes se podrán observar tres planetas en forma sucesiva: Venus, Júpiter y Saturno entre las constelaciones de Escorpión y Sagitario, dispuestos en posición vertical sobre el horizonte sur-oeste alrededor de las 6 pm, una vez ocultado el sol. |
Como Utilizar el Mapa Estelar
Para orientarse en el Mapa Estelar el observador deberá rotarlo, de modo que el punto cardinal en cuya dirección está mirando se encuentre hacia abajo.
En este mapa del mes correspondiente se muestra un conjunto de constelaciones cuyas posiciones en la bóveda celeste con relación al cenit y al horizonte cambian continuamente en sentido Este-Oeste por efecto de la rotación real de la Tierra. De una noche a la siguiente este desplazamiento es de 4 minutos menos con relación a la posición de la noche anterior. Esto significa que el horario para observar del cielo con la ayuda del mapa se adelanta una media hora por semana, una hora por quincena y dos horas por mes, en términos generales.
El tiempo más propicio para el observador casual del cielo fue escogido en el mapa estelar entre las 7 y 9 pm (horario local), siendo esta última hora la que corresponde al aspecto del cielo a principios del mes, mientras el horario alrededor de las 7 pm rige para finales del mismo, tal como lo indica la regla que encabeza el mapa.
En los meses siguientes saldrán por el horizonte Noreste-Este-Sureste (N-E-S) nuevas configuraciones estelares y se ocultarán por el Noroeste-Oeste-Suroeste (N-O-S) aquellas próximas al horizonte en esta última dirección. Esto se debe al movimiento de la Tierra en su órbita alrededor del sol, la cual describe en sentido Oeste a Este.
Este cambio es muy evidente en las constelaciones zodiacales: en Noviembre, por ejemplo, la constelación de Escorpión (Scorpio) se oculta en medio del crepúsculo, mientras resurge a la luz del alba la Balanza (Libra) que la precede.
De igual manera, el grupo de las Pléyades, (popularmente conocidas como las Siete Cabritas), es un asterismo de verano. Aparece a principios de Noviembre por el este después de la puesta del sol y desaparece en Mayo en el oeste durante el crepúsculo vespertino. De Mayo a Noviembre son visibles en horas de la madrugada.
En este mapa del mes correspondiente se muestra un conjunto de constelaciones cuyas posiciones en la bóveda celeste con relación al cenit y al horizonte cambian continuamente en sentido Este-Oeste por efecto de la rotación real de la Tierra. De una noche a la siguiente este desplazamiento es de 4 minutos menos con relación a la posición de la noche anterior. Esto significa que el horario para observar del cielo con la ayuda del mapa se adelanta una media hora por semana, una hora por quincena y dos horas por mes, en términos generales.
El tiempo más propicio para el observador casual del cielo fue escogido en el mapa estelar entre las 7 y 9 pm (horario local), siendo esta última hora la que corresponde al aspecto del cielo a principios del mes, mientras el horario alrededor de las 7 pm rige para finales del mismo, tal como lo indica la regla que encabeza el mapa.
En los meses siguientes saldrán por el horizonte Noreste-Este-Sureste (N-E-S) nuevas configuraciones estelares y se ocultarán por el Noroeste-Oeste-Suroeste (N-O-S) aquellas próximas al horizonte en esta última dirección. Esto se debe al movimiento de la Tierra en su órbita alrededor del sol, la cual describe en sentido Oeste a Este.
Este cambio es muy evidente en las constelaciones zodiacales: en Noviembre, por ejemplo, la constelación de Escorpión (Scorpio) se oculta en medio del crepúsculo, mientras resurge a la luz del alba la Balanza (Libra) que la precede.
De igual manera, el grupo de las Pléyades, (popularmente conocidas como las Siete Cabritas), es un asterismo de verano. Aparece a principios de Noviembre por el este después de la puesta del sol y desaparece en Mayo en el oeste durante el crepúsculo vespertino. De Mayo a Noviembre son visibles en horas de la madrugada.
El movimiento anual de la Tierra alrededor del Sol proyecta el disco solar en las diferentes y sucesivas constelaciones del Zodíaco. En el solsticio de verano 21 de junio, por ejemplo el sol, visto desde nuestro planeta, se localiza entre las constelaciones de Toro y Gemelos. Seis meses, después, el 22 de diciembre, la proyección del disco solar es entre Escorpión y Sagitario. (elcielodelmes.com)
Las constelaciones del Zodíaco no corresponden a los respectivos signos, como evidentemente coincidían hace 2,000 años. |
Cada mapa mensual se centra en la hora local en Managua, que es también la oficial para el resto de nuestras ciudades, incluidos los países centroamericanos. En Managua hay pocos minutos de diferencia entre el aspecto del cielo en determinado momento y el que se observa en otros lugares situados más al este, o al oeste del meridiano de la capital: 86º West (Oeste), lo cual es poco significativo dada la limitada extensión del país en relación a la duración de la rotación del planeta.
Posición y Movimiento de la Esfera Celeste
En toda la redondez de la esfera celeste parecen estar engastados el sol, la luna, los planetas y las estrellas, razón por la cual en la antigüedad se suponía que esta esfera era sólida, cristalina y que todos los astros estaban prendidos en ella.
En un momento dado contemplamos sólo un hemisferio (la bóveda celeste), sobre el horizonte del observador.
En un momento dado contemplamos sólo un hemisferio (la bóveda celeste), sobre el horizonte del observador.
Un grabado supuestamente de origen medieval muestra a un viajero que llegó hasta el fin del mundo, donde el cielo se junta con la Tierra, para inspeccionar el mecanismo externo que hacía rotar el firmamento, donde los astros estaban engastados en una especie de esfera de dimensiones finitas. Esta ilustración fue originalmente presentada por el astrónomo francés Camile Flammarión en uno de sus libros de divulgación sobre la astronomía, publicado en Paris en 1888. |
No obstante, parecía obvio para aquellos primeros observadores que el sol y la luna se desplazaban en la esfera celeste, asi como los cinco astros: Mercurio, Venus, Marte, Júpiter y Saturno entonces conocidos, a los que llamaron “planetas”, palabra sinónima a “vagabundos”, contrariamente a las estrellas llamadas “fijas” por encontrarse siempre en la misma posición en relación con las otras que conformaban una constelación.
En el transcurso de los siglos y con el avance de las ciencias, se deshizo aquella visión. La esfera celeste es un espacio abierto en el universo. El sol es una de las miles de millones de estrellas que con el resto de los planetas y sus respectivas lunas giran independientes a su alrededor, describiendo sus órbitas a distintas distancias y en períodos de tiempo también diferentes.
Por otra parte, las estrellas son soles de diversos tamaños, masas y temperaturas, igualmente dotados de planetas. Se encuentran agrupadas en grandes sistemas llamados galaxias. Su aparente inmovilidad en la “esfera celeste” es efecto de las enormes distancias donde se encuentran, por lo cual se requieren siglos y milenios para advertir a simple vista el cambio de posición y configuración desde la Tierra. A manera de comparación la luz del sol, a la velocidad de 300,000 km por segundo, emplea unos 8 minutos para llegar a la Tierra; 6 horas al planeta Plutón y 4 años con 4 meses en alcanzar a Alfa de Centauro, la más cercana estrella a nuestro sistema solar.
Regresando a la esfera celeste, solamente podemos observar una mitad o hemisferio, llamada bóveda celeste, posada sobre el horizonte en un momento dado, como la representada en el Mapa Estelar o Mapa Celeste, visible para una fecha y hora determinada del mes.
En el transcurso de los siglos y con el avance de las ciencias, se deshizo aquella visión. La esfera celeste es un espacio abierto en el universo. El sol es una de las miles de millones de estrellas que con el resto de los planetas y sus respectivas lunas giran independientes a su alrededor, describiendo sus órbitas a distintas distancias y en períodos de tiempo también diferentes.
Por otra parte, las estrellas son soles de diversos tamaños, masas y temperaturas, igualmente dotados de planetas. Se encuentran agrupadas en grandes sistemas llamados galaxias. Su aparente inmovilidad en la “esfera celeste” es efecto de las enormes distancias donde se encuentran, por lo cual se requieren siglos y milenios para advertir a simple vista el cambio de posición y configuración desde la Tierra. A manera de comparación la luz del sol, a la velocidad de 300,000 km por segundo, emplea unos 8 minutos para llegar a la Tierra; 6 horas al planeta Plutón y 4 años con 4 meses en alcanzar a Alfa de Centauro, la más cercana estrella a nuestro sistema solar.
Regresando a la esfera celeste, solamente podemos observar una mitad o hemisferio, llamada bóveda celeste, posada sobre el horizonte en un momento dado, como la representada en el Mapa Estelar o Mapa Celeste, visible para una fecha y hora determinada del mes.
En el Mapa Celeste el meridiano es la línea imaginaria orientada de norte a sur (N-S) que pasa por el cenit. Esta línea es más bien una curva que corta por en medio la bóveda celeste, separando las estrellas que ascienden por el Este de las otras que descienden hacia el Oeste. Se conoce como culminación el tránsito o paso de un astro por el meridiano. En ese momento se encuentra en el punto de mayor altitud de su curso en relación al horizonte.
La esfera celeste se mueve lentamente en el sentido Este-Oeste, movimiento aparente pues es reflejo de la rotación real de la Tierra de 23 horas y 56 minutos en sentido contrario. Por esa razón las estrellas que se desplazan en la bóveda celeste alcanzan el mismo punto en relación al horizonte 4 minutos más temprano de una noche a la siguiente en su curso cotidiano por el cielo. Curiosamente esos 4 minutos diarios suman un día adicional al término de un año. En otras palabras, la Tierra rota 366 veces en 365 días.
La posición de un astro en un momento dado se determina por dos variantes: su altitud y azimut. La altitud se mide en grados a partir del horizonte (0º), en dirección al cenit (90º), el punto más alto de la bóveda celeste directamente sobre nuestra cabeza. El azimut se refiere a la dirección en que se encuentra el astro en determinado momento, con relación a los puntos cardinales del horizonte. Se cuenta de 0º a 360º a partir del punto Norte, en el sentido de las agujas del reloj puesto en posición horizontal, siguiendo el orden presentado en la parte inferior del Mapa Estelar.
La posición de un astro en un momento dado se determina por dos variantes: su altitud y azimut. La altitud se mide en grados a partir del horizonte (0º), en dirección al cenit (90º), el punto más alto de la bóveda celeste directamente sobre nuestra cabeza. El azimut se refiere a la dirección en que se encuentra el astro en determinado momento, con relación a los puntos cardinales del horizonte. Se cuenta de 0º a 360º a partir del punto Norte, en el sentido de las agujas del reloj puesto en posición horizontal, siguiendo el orden presentado en la parte inferior del Mapa Estelar.
Ubicación de una estrella en la bóveda celeste en un momento dado, cuando su altitud es de 60º y el azimut 40º, aproximadamente, contado a partir del punto Norte.
(Mathematics Stack Exchange). |
Consultando el Mapa Estelar de Noviembre, la estrella Capella del Cochero tiene por altura unos 15º y por azimut 45º sobre el horizonte noreste (NE), Achernar del Erídano 20º y 165º respectivamente sobre el Sur y Altair del Águila 30º y 270º sobre el horizonte Oeste.
Estas posiciones cambian lentamente por la rotación de la esfera celeste, de tal modo que la forma más práctica y permanente para identificar una estrella es por medio del mapa del mes, según las fechas y horas indicadas arriba del mismo.
Se denomina orto el punto de salida de un astro en el horizonte y ocaso el que marca su ocultación en el horizonte opuesto. Obsérvese en el mapa estelar de Noviembre que la estrella Rigel de Orión acaba de emerger de su orto por el horizonte Este; mientras Vega de Lira baja hacia su ocaso rumbo al horizonte Noroeste (NO).
Rotación de la Tierra y su Efecto
El eje de rotación de la Tierra apunta en dirección a la Estrella Polar (North Star), produciendo el efecto aparente que las estrellas vecinas describan círculos en su alrededor, según se muestra en esta fotografía tomada con exposición desde el Gemini Observatory North en el Mauna Kea, Hawaii, a 4,130 mts de elevación, en la latitud 20º. Aquellas estrellas que se encuentran a menos de 20º sobre el horizonte de Hawaii son circumpolares, es decir, siempre visibles desde esa latitud, por completar sus cursos enteramente arriba del horizonte de ese lugar.
El eje de rotación de la Tierra, al apuntar en dirección a la Estrella Polar, (Polaris), determina cursos desiguales de los astros sobre el horizonte para un observador en una determinada latitud, salvo si este se encuentra en el ecuador terrestre donde los trazos serían perpendiculares al horizonte. (Esta ilustración corresponde a un observador situado en la latitud 40º, (New York o Roma).
|
La rotación real del globo terrestre de Oeste a Este, al apuntar en dirección a la Estrella Polar (North Star), produce el efecto aparente que las estrellas describan círculos de Este a Oeste en su alrededor. En efecto, las estrellas, así como el sol, la luna y los planetas parecen describir círculos de un horizonte al otro, según la latitud geográfica del observador, siendo los cursos y visibilidad de mayor duración para aquellas situadas en el hemisferio donde está ubicado el observador. Por ejemplo: en el horizonte de Managua, (12º N de latitud geográfica), una estrella que se encuentra a 45º N de latitud celeste permanecerá sobre el horizonte 13 horas 45 minutos, a diferencia de otra, ubicada a 45º S en el hemisferio opuesto, la cual requiere 10 horas 15 minutos para cursar de un horizonte al otro: es decir su trayecto y visión es de menor duración que la estrella del primer ejemplo. Ambas cifras sumadas equivalen a las 24 horas de la rotación de la Tierra, que es de 360º.
Circuitos descritos por las estrellas al desplazarse por la bóveda celeste, tal como se orientan sobre el horizonte cuando vistas desde el Polo Norte, el Ecuador y una latitud intermedia, por ejemplo en Montreal. (El cielo del mes).
|
Solamente aquellas estrellas que se encuentran en el propio ecuador celeste, (como las popularmente llamadas “Tres Marías”, en el cinto de Orión), tienen cursos de 12 horas completas; salen exactamente al Este y se ocultan justamente en el Oeste, vistas desde cualquier latitud de la Tierra.
Las estrellas situadas alrededor del polo celeste, llamadas circumpolares, describen órbitas completas arriba del horizonte, nunca salen ni se ponen. Dicho sea al respecto que en Managua la estrella Polar (Polaris) se localiza siempre fija a 12º de altitud sobre el horizonte norte de la ciudad. En general, la altitud permanente de la Polar es igual a la latitud geográfica del observador. Alrededor de la estrella Polar, rotan todas las estrellas del Hemisferio Norte, siendo las más destacadas las que forman la Osa Mayor, (Big Dipper en el vernáculo inglés o el Carro de David en el imaginario latino), y las que se encuentran en la constelación de Casiopea. Ambas constelaciones se mueven alrededor de la Estrella Polar, aunque en posiciones opuestas: mientras la una sube por el noreste la otra baja por el noroeste. Son circumpolares en lugares situados al norte de la latitud 40º, donde se las puede admirar todas las noches en sus incesantes giros en torno a la Estrella Polar. La Estrella Polar, (North Star en inglés), se localiza siempre fija a unos 12º de altitud sobre el horizonte norte de la ciudad de Managua.
Este dibujo corresponde a las primeras horas de la noche en el mes de Marzo, mirando hacia el horizonte Norte. |
La Osa Mayor es circumpolar a partir de los
40º Norte, en Norteamérica y Europa. Polaris, (α Ursae Minoris), es una estrella de segunda magnitud, situada a 434 años-luz, o sea que su luz, viajando a razón de 300,000 kms por segundo, requiere esa cantidad de años para llegar hasta nosotros; en otras palabras: hoy la contemplamos tal como era en el año 1585 d.C. Polaris ha sido muy observada como estrella de orientación nocturna, especialmente por los pasados navegantes que recorrían los mares en el hemisferio norte, pues una vez traspasado el ecuador terrestre (latitud 00o) es imposible verla por quedar situada debajo del horizonte del observador.
|
La Cruz del Sur es circumpolar a partir
de los 35 Sur, en Chile y Argentina. También existe la estrella polar del sur: (Polaris Australis), mejor denominada como Sigma Octantis, (por encontrase en la constelación del Octante), aunque invisible por estar siempre debajo del horizonte de nuestra latitud. Es además una estrella poco brillante, de magnitud 5.5, casi en el límite de nuestra visión, salvo para los habitantes del hemisferio sur que en su mayoría no la identifican debido a su escaso brillo.
|
La estrella Polar del Norte es visible en Nicaragua, levantada unos 12º sobre el horizonte norte de Managua, (sobre el lago Xolotlán), Su altitud angular, (distancia aproximada entre los extremos de los dedos meñique e índice, con la mano extendida al extremo del brazo), es igual a la latitud de esta ciudad. Su baja posición sobre dicho horizonte dificulta en cierto modo su visión, especialmente en sitios urbanizados, oculta por lo común tras el tejado de la casa vecina de enfrente, o detrás de un árbol que obstruya su observación; tambien difícil de observar a causa de la luminosidad de la ciudad, o de la luna próxima a su fase llena.
Por último, facilita su ubicación el Mapa Celeste de cada mes, pues siempre permanece en la misma posición sobre el horizonte norte, sirviendo de referencia para identificar las constelaciones visibles en su alrededor.
Por último, facilita su ubicación el Mapa Celeste de cada mes, pues siempre permanece en la misma posición sobre el horizonte norte, sirviendo de referencia para identificar las constelaciones visibles en su alrededor.
Del Mapa al Cielo
Al observar detenidamente el Mapa Estelar de Noviembre, para familiarizarse con el aspecto del cielo en Managua, (también válido para cualquier lugar del país), se advierte que las estrellas de cada constelación están unidas por líneas que facilitan su identificación. Se omite la ubicación de la luna y eventualmente la de los planetas, pues estos astros cambian de posición entre las estrellas de manera continua.
Localizar estrellas y constelaciones en el cielo nocturno no deja de ser un reto aun para aquellos ojos escudriñadores, lo cual hace de la observación de las mismas una experiencia de búsqueda y encuentro que refina nuestra habilidad de orientarnos e identificarlas, así como pone a prueba nuestra imaginación y agudeza visual. Para lograrlo, es importante que el observador se oriente ubicando previamente los puntos cardinales del lugar donde se encuentra, seleccionando espacios abiertos, oscuros, con menos luces artificiales, árboles y de otros obstáculos que le obstruyan la visión del firmamento. Bajo estas condiciones se puede observar mejor la Vía Láctea como un difuso arco de luz que cruza el cielo del uno al otro horizonte, en diferentes direcciones según la época del año. En el cielo de Noviembre, por ejemplo, su trayectoria es de Suroeste (SO) a Noreste (NE), atravesando sucesivamente las constelaciones Sagitario, Águila, Cisne, Cefeo, Casiopea y Perseo. |
VIA LACTEA | imagenesLa banda de la Vía Láctea, se destaca sobre el Cerro del Hoyo. La pequeña mancha a la izquierda del centro de la foto es la Galaxia de Andrómeda.
(Osiris Castillo, 2007) La banda de la Vía Láctea en el sector de Escorpión y Sagitario,
vista sobre el volcán Masaya en erupción. (Rene Urroz, 2016) El centro de nuestra galaxia se proyecta como la banda de la Vía Láctea, que en este sector del cielo se presenta como una nube brillante, atravesada por en medio con girones de polvo cósmico que la oscurecen a su paso por Sagitario. (Jorge Luis Moreno Luna)
|
Distancia Angular entre las Estrellas
Desde la Tierra los espacios entre los astros se miden geométricamente en ángulos, cuyo vértice es el ojo del observador. Así por ejemplo, entre las estrellas Póllux y Cástor en la constelación de los Gemelos, la primera se encuentra a 33 años-luz de distancia y la segunda a 51. La distancia angular entre ambas estrellas es de 4º 30’, aunque en el espacio están realmente separadas a 18 años-luz la una de la otra.
Una forma empírica de medir distancias angulares cortas es extender el brazo en dirección a las estrellas en cuestión y utilizar el puño, la mano o los dedos como medidas de referencias. Éste es el método usual de los aficionados para medir la distancia aparente entre dos estrellas separadas angularmente en el firmamento. esta distancia, desde luego, no corresponde a sus verdaderos valores medidos en años-luz, o sea la que realmente las separa en el espacio. Por ejemplo, la distancia angular entre las dos estrellas más brillantes Alfa y Beta del Centauro, es de 4º 24´, según su posición observada desde la Tierra, aunque en el espacio real están verdaderamente separadas por más de 500 años-luz. |
En la escala angular, un grado equivale a 1/90 parte del arco meridiano medido entre el horizonte y el cenit. En la práctica de un observador casual con el brazo extendido largamente hacia el cielo, 10º abarcan aproximadamente el espacio cubierto entre los nudillos extremos de un puño cerrado; 15º a un "jeme", (distancia entre los dedos pulgar e índice extendidos); 25º a una "cuarta", (con los dedos extremos muy separados).
Algunas Distancias AngularesPléyades-Aldebarán 14º
Aldebarán-Betelgeuse 21º Betelgeuse-Sirio 27º Sirio-Canopo 36º Canopo-Proción 60º Régulo-Pléyades 90º En la figura, se usa la mano, los dedos abiertos, cerrados o en puño como escala angular.
|